Posibles motivos de la pulsación repetitiva de botones:

1. Comunicación: En ocasiones, pulsar un botón sin parar es un intento directo de comunicación. Cuando una persona tiene un mensaje que comunicar, pero desconoce o no puede acceder a las palabras con las que transmitir con exactitud lo que quiere decir, repetir lo que sabe decir puede ser la mejor opción. Puede que aún no le hayamos enseñado dónde están las palabras que necesita o que su dispositivo no disponga de ellas. Quizás no sabe cómo conectar las palabras a su experiencia o simplemente está agobiada. La repetición podría indicar frustración o agitación, o que aún no se ha respondido a lo que la persona quería decir.

2. Exploración del dispositivo: Aunque la planificación motora que nos permite usar una palabra en el dispositivo de CAA empieza a formarse muy rápido, encontrar las palabras cuando las necesitamos requiere muchas más repeticiones. Esto también les ocurre a los estudiantes. Al igual que hacemos las personas cuando aprendemos a decir o escribir una palabra nueva, los estudiantes pueden repetir una palabra muchas veces seguidas cuando aprenden a encontrarla en su CAA. Tocar los botones una y otra vez es una vía para explorar las palabras y su ubicación y hacer el proceso más automático por medio de la repetición.

3. Desarrollo del lenguaje: La repetición es parte del aprendizaje de una lengua. Algunos usuarios de CAA, sobre todo quienes presentan dificultades en el procesamiento auditivo, podrían estar pulsando los botones para escuchar las palabras varias veces y así asociarlas con su significado. Este comportamiento es similar al balbuceo o a las primeras etapas del desarrollo del lenguaje, en las que las personas experimentamos con los sonidos y las palabras a fin de darles sentido. Para los usuarios de CAA que procesan el lenguaje de forma gestáltica, la repetición de palabras puede formar parte de un proceso de fragmentación de frases más largas que contienen esas palabras.

4. Estereotipias: Cuando la realizan usuarios de CAA, la pulsación repetitiva de botones puede ser una estereotipia. Esta conducta puede servirles para gestionar el estrés, la agitación y otros estados emocionales. Los sonidos repetitivos o la sensación de pulsar un mismo botón varias veces pueden ser tranquilizadores o placenteros. En algunos casos, pueden ser una forma de expresar alegría o de hacer frente a una sobreestimulación. Es importante entender que las estereotipias cumplen una función esencial y que deben reafirmarse en lugar de reprimirse. Si un usuario de CAA recurre a las estereotipias como medio para autorregularse ante un problema como la sobrecarga sensorial, también deberemos intentar poner remedio al problema subyacente.

Formas prácticas de actuar

Ahora que entendemos cuáles son los posibles motivos de la pulsación repetitiva de botones, es fundamental que conozcamos estrategias para ayudar al usuario de CAA en lugar de intentar poner fin a su comportamiento. Tratar de reducir la comunicación repetitiva conduce a menos comunicación en general, ¡y ese no es el resultado que queremos!

1. Asume que es una forma de comunicación: Si dudas de que la pulsación repetitiva sea un intento de comunicación, haz como si lo fuera. Responde con fórmulas como «¿Quieres decir...?» o «Creo que lo que quieres decir es...» y observa la reacción del usuario. Si te hace saber que te equivocas, haz otras preguntas y ajusta tus repuestas. Parte siempre de la base de que cualquier acción podría ser una forma de comunicación. Otra posibilidad es buscar conexiones entre la palabra repetida y el contenido que se esté estudiando en clase. Si en clase han estado viendo la densidad y han hecho pruebas de hundimiento y flotación, «surf» podría ser una pregunta sobre cómo funciona la densidad en el surf: las personas apenas flotamos, pero cuando hacemos surf, ¡estamos casi completamente fuera del agua sobre una fina tabla!

2. Amplía su lenguaje: Cuando lo que se pulsa repetidamente son palabras específicas, usa esas palabras para ampliar su vocabulario. Si un usuario de CAA pulsa sin parar «surf», puedes decirle «El surf es divertido». «¿Quieres hablar sobre ir a hacer surf?». Así no solo estarás reconociendo la aportación del usuario, sino que también enriquecerás su uso del lenguaje.

3. Enseña al usuario a regular el volumen y a usar auriculares: Si la repetición tiene fines comunicativos, tratar que la gente del entorno del usuario de CAA escuche menos la repetición es contraproducente. Por este motivo, nunca debemos imponer estas opciones. ¿Y si se trata de un intento de comunicación que hemos malinterpretado o que no hemos reconocido? Aún en ese caso, los auriculares pueden permitir a los usuarios de CAA explorar el dispositivo, desarrollar sus habilidades lingüísticas o tranquilizarse sin que las personas a su alrededor oigan nada. Si saben conectar y desconectar los auriculares sin ayuda, pueden hasta decirnos si debemos o no responder a un mensaje determinado. Si el usuario de CAA es capaz de regular el volumen de forma que él pueda oír los sonidos, pero los demás no, conseguiríamos el mismo efecto que con los auriculares.

4. Crea espacios y momentos para explorar el dispositivo: Fomenta la exploración del dispositivo creando momentos para practicar o descubrir nuevos botones. Deja que el usuario interactúe con la CAA sin restricciones, a fin de reforzar su aprendizaje del sistema.

5. Reafirma las estereotipias: Si la pulsación repetitiva es una estereotipia, es importante crear un entorno que respete y valide estos comportamientos. Algunas personas se alegran cuando alguien quiere interactuar con ellas mientras están realizando un movimiento repetitivo. Otras prefieren que se validen estas conductas sin que medie la interacción y, en ocasiones, lo que la persona que presenta la estereotipia necesita es estar sola. Con independencia de lo anterior, crear espacios o momentos donde se fomenten estas conductas puede ayudar a los usuarios de CAA a sentirse seguros y apoyados. Ofrecer otros medios de canalización de las emociones, como juguetes antiestrés o instrumentos de percusión suave, también puede ayudar a satisfacer sus necesidades.

6. Evita quitarle el dispositivo al usuario o silenciarlo: Nunca le quites el dispositivo de CAA al usuario ni lo silencies o le bajes el volumen sin su consentimiento. Hacerlo puede privar al usuario de su capacidad de comunicarse y generarle angustia o resultarle traumático. La pulsación repetitiva, tanto si tiene fines de exploración o comunicación como si se trata de una estereotipia, no debe entenderse como un comportamiento problemático que hay que erradicar o controlar.

Entender las razones que se esconden tras la pulsación repetitiva de botones te ayudará a construir un entorno de aprendizaje seguro y respetuoso con los usuarios de CAA, que promueva tanto su desarrollo del lenguaje como una comunicación eficaz.